Aquí tienes una lista de accesorios y utensilios de cocina recomendables para hacer esta receta:
- Bandeja para horno
- Tabla de cortar
- Sartén antiadherente
- Cuchillo afilado
¿Cómo hacer una bruschetta súper sabrosa?
1. Prepara el pan
Precalienta el horno a 200°C.
Corta el pan en rebanadas de aproximadamente 1cm de grosor. Te recomiendo que no las hagas ni muy finas ni muy gruesas para que queden crujientes por fuera pero jugositas por dentro.
Nota: Si cortas el pan en diagonal quedará más bonito y tendrás más espacio para poner el relleno jeje.
2. Tuesta el pan
Coloca las rebanadas en una bandeja de horno y hornéalas unos 5-7 minutos hasta que queden doraditas.
Nota: Estate pendiente del pan los últimos minutos para que no se te queme. ¡En un momento pueden pasar de estar perfectas a quemadas!
3. Prepara el relleno de tomate y ajo
Mientras el pan se hornea, vamos con la parte más importante de la receta.
Pica los tomates en daditos pequeños y el ajo bien finito. Es súper importante que los trozos queden pequeñitos para que la bruschetta sea fácil de comer.
4. Cocina los ingredientes
Pon una sartén a fuego medio con el aceite de oliva y añade el ajo. Déjalo dorar un poquito hasta que empiece a oler genial (1-2 minutos aprox.).
Agrega los tomates y cocínalos 3-4 minutos hasta que suelten su juguito. ¡Esto es justo lo que queremos!
5. Termina y emplata
Añade el vinagre balsámico y la albahaca picada. Dale un par de vueltas más y retira del fuego. Prueba y ajusta la sal y pimienta al gusto.
Pon una buena cantidad de la mezcla sobre cada rebanada de pan. ¡No te quedes corto, aquí más es mejor!
Consejos y trucos para esta bruschetta casera
- La calidad del pan es súper importante. Intenta usar una buena baguette o pan italiano.
- ¿Por qué cocinar los tomates? Al cocinarlos un poquito con el ajo, los sabores quedan más intensos y el pan no se empapa tanto.
- Si no encuentras albahaca fresca, puedes usar orégano seco, aunque el sabor será diferente.
El Origen de la Bruschetta
Esta recetita italiana es una maravilla que demuestra que lo sencillo, cuando está bien hecho, puede ser espectacular. Viene de la zona central de Italia, donde tradicionalmente se hacía para aprovechar el pan del día anterior y celebrar la llegada del aceite nuevo.
¡Es increíble que una receta tan sencilla pueda estar tan rica! Con estos truquitos que te he contado, te va a quedar de maravilla.